De vuelta...

La vuelta a clase siempre me han transtornado un poco. Sin saber por qué, acabo controlando todos mis pasos durante la noche (pre) y la mañana (pos).
Acabo convirtiéndome en una metódica enfermiza y mi vida, durante el comienzo del curso, acaba siendo demasiado unidireccional.
Pero como casi siempre, el comienzo me cuesta.
Acabo siendo advenediza y, el primer día, empiezo con mal pié. Pero no solo me dura en las horas lectivas, si no que también, llega a durar todo el día, pues hoy, he sufrido varios percances.
Mis zapatillas se rompieron cuando caminaba hacia casa de F, además, me enganché con la cerradura del portal y me hice un arañazo que llegaba desde un extremo a otro de la mano.
El ataque de alergia me vino demasiado fuerte y, no podré saber exactamente a qué soy alérgica hasta octubre.
Tengo una profesora de inglés, que, además de joven, no sabe nada de la asignatura que enseña, y, mis compañeros de clases son tremendamente maleducados y ufanos - algunos, incluso, bordes.-
¿La buena noticia? Que, posiblemente, haya encontrado mi vocación.
Tengo el presentimiento que, este curso me va a ir bien, además, me encontré a un antiguo compañero de instituto con el cual me presentimiento muy bien.
En sí, es admirable que, el trabajo sea fructífero puesto que, siempre tengo ganas y energía para las clases.